Mar del Plata Entre Todos brindó un adelanto a LA CAPITAL del capítulo de gestión de residuos sólidos del segundo informe de la Red.
Los datos sorprenden y más cuando se contextualizan. Esto es algo que Mar del Plata Entre Todos recoge y refleja en el capítulo de Sostenibilidad Ambiental – Gestión de Residuos Sólidos del segundo informe de la Red, que mañana será presentado a toda la comunidad en un evento libre y gratuito, a partir de las 18 en La Normandina.
A modo de adelanto, LA CAPITAL pudo acceder a parte de lo que será la nueva presentación de esta iniciativa local que, sin representar ideologías partidarias y conformada por organizaciones de la sociedad civil, busca “monitorear y socializar información confiable para que la sociedad, sus organizaciones y el Gobierno, puedan involucrarse en la mejora de la calidad de vida actual y futura de la ciudad y la región”.
Si bien el trabajo final cuenta con veinte capítulos sobre temas relevantes para el devenir local -el informe cuenta con casi 600 páginas y estará disponible para todo público en la web de la Red-, el apartado dedicado a la basura representa una de las problemáticas que más fuerza siempre ha tenido en las gestiones locales.
Los datos provistos por el equipo de la Red, y relevados en su mayoría durante el año 2016, sorprenden y preocupan, sobre todo si se los compara con los datos que los mismos profesionales relevaron en 2015.
Opinión de los vecinos
Uno de los datos más impactante tiene que ver con la opinión de la higiene urbana de los barrios por parte de los propios marplatenses que, en el marco de la Encuesta de Percepción Ciudadana (EPH), arrojó que un 35,7% de los vecinos percibe que su barrio es limpio/muy limpio, mientras que un porcentaje casi similar, de 32,2%, percibe a su barrio como sucio/muy sucio.
Estos números presentan una variación si se los compara con el primer informe. Los datos de 2015 sobre los vecinos que aseguran tener un barrio limpio/muy limpio presentan una disminución de 7,4 puntos porcentuales en relación a los de 2016; en tanto que quienes opinaron en forma negativa (sucio/muy sucio) mostraron un aumento de la disconformidad de 8,5 puntos porcentuales respecto el año anterior.
Los responsables
El capítulo del 2° informe de la Red señala que al consultarles a los marplatenses sobre la responsabilidad del estado de limpieza del barrio, la mayoría de los encuestados en 2016 se la atribuye al comportamiento de los vecinos (39,8%), en segundo lugar a la empresa recolectora de residuos (31,1%) y en tercer lugar al municipio (23,3%). Respecto las respuestas obtenidas en 2015, en segundo lugar la responsabilidad cayó en el municipio y en tercer lugar a la empresa de higiene urbana.
La separación disminuye
Otro de los temas que hacen a la percepción de suciedad en los barrios por parte de los vecinos es la separación en origen de materiales recuperables, una iniciativa que puede realizar cada hogar marplatense desde 2012, cuando se dio inicio a la operatoria.
El informe señala que entre los vecinos encuestados durante 2016 el 48,8% respondió que sí cumple con la separación y cronograma semanal, mientras que el 17,9% indició que sólo lo hace a veces y el 26,1% que no separa.
En este punto se advierte una disminución calificada por los especialistas como “notable”. Entre quienes responden que cumplen, cayó un 12,7 puntos porcentuales en relación a 2015 y un aumento de 6 puntos porcentuales entre quienes cumplen a veces. También se observa un aumento de seis puntos porcentuales entre quienes directamente reconocen no separar.
La Red indicó al respecto que “la concientización progresiva de la población acerca de la importancia social, ambiental y económica de la separación y el reciclaje, aporta a lograr un cambio de actitud y compromiso en la separación de residuos en origen en la comunidad marplatense; y a la viabilidad de los procesos de inclusión laboral de los recuperadores informales”.
Microbasurales
La Red también abordó la cuestión de los microbasurales y elaboró un mapa a partir del relevamiento realizado por el municipio. Surgió del relevamiento que los mismos se generan de manera recurrente en áreas sin servicio de recolección de montículos.
Según el propio informe, la empresa recolectora presenta una amplia cobertura de 36.578 cuadras, aunque el promedio diario es de 24.761. Y el 40% de éstas no están asfaltadas.
Para poder llevar adelante el servicio de retirar la disposición voluminosa de residuos en la vía pública, la empresa de higiene urbana debe contar con camiones almejeros y la extensión de esa cobertura alcanza, por contrario, 25.698, realizándose un promedio diario de 4.283 cuadras. Es en aquellas zonas pobladas a las que no se accede donde se producen con mayor frecuencia los microbasurales.
Según señalan en un mapa, el área comprendida entre las avenidas Presidente Perón, Champagnat, Monseñor Zabala y la ruta 226 es la que presenta más focos de basura acumulada en la vía pública. Al sur de Juan B. Justo y Polonia y la zona comprendida entre las avenidas Fortunato de la Plaza, Antártida Argentina y Jorge Newbery siguen, con importante cantidad de microbasurales registrados.
.- En 2016 se dispusieron un promedio de 1,9 Kg de residuos por persona
En lo que respecta a la disposición de residuos sólidos, el capitulo del 2° informe de Mar del Plata Entre Todos, al que LA CAPITAL tuvo acceso, advierte, en comparación 2016-2015, una disminución del ritmo de trabajo en la Gestión Integral de Residuos Sólidos (Girsu).
Específicamente, el trabajo señala que “si bien el municipio ha formulado un plan de Girsu y se han registrado avances importantes como el cierre y saneado del viejo basural a cielo abierto, la inauguración de un Nuevo Centro de Disposición Final de residuos sólidos urbanos, obras de mejora en la Planta de Recuperación de Materiales existe y el programa de separación de residuos, algunos de los esfuerzos mencionados no han sido sostenidos en el tiempo, por lo que volvieron a presentarse inconvenientes relacionados con la disposición final, progresiva merma en la cantidad de residuos recuperados y persiste el trabajo de una cantidad significativa de recuperadores informales en áreas adyacentes a la descarga de residuos en condiciones de precariedad”.
El trabajo detalla que, para 2016, el total de residuos domiciliarios recolectados diariamente era de aproximadamente 450 toneladas durante el invierno, mientras que en verano ese número alcanzaba las 800 toneladas. Además, ese mismo año se dispusieron en promedio 1,9 kilogramos de residuos diarios por habitante del partido de General Pueyrredon (incluido todo tipo de residuo) y a nivel domiciliario, se dispusieron 0,67 kilogramos por habitante y por día, en promedio.
Unos 7 años para el Predio
Por otra parte, la Red también estableció que, de acuerdo a lo informado por la Dirección de Gestión de Residuos a la fecha de preparación del informe, “la vida útil remanente del Centro de Disposición Final considerando la considerando la tasa de disposición actual de residuos es de aproximadamente 7 años”. “Sin embargo, con el transcurso de la operación se ha experimentado que la vida útil del relleno puede extenderse según el grado de compactación”, agregó.
Este dato es llamativo, ya que, cuando LA CAPITAL fue al primer informe (2015) a observar el análisis hecho sobre ese punto, se encontró con que, oportunamente, la Red señalaba que “la vida residual sería de 10 años si anualmente y de manera constante se mantuviera la disposición total a niveles de 2015, con la densidad histórica, sin considerar medidas adicionales de gestión”.
En lo que respecta a la separación y clasificación, en la que trabajan los recuperadores pertenecientes a la Cooperativa CURA, el informe señala que, desde puesta en operación la marcha en 2013, los volúmenes de materiales recuperados han ido disminuyendo.
En el año 2013 se ingresaron a la cadena de reciclables un total de 2.031.722 Kg y finalmente en 2016 se redujo a 1.696.389 Kg. Es decir, entre 2013 y 2016 se separó y clasificó un la planta un 16,5% menos de lo que inicialmente se recuperó en el 2013.
De todas maneras, si se compara el periodo 2015-2016 se percibe un ligero incremento de 7,3% en el último año.
En cuanto a los materiales recuperados, el que lidera el listado es el vidrio (33%), seguido por el papel (28%), el PET Cristal (17%), el PET Verde (5%) y los polietilenos de alta densidad -soplado-, metales y cartón (2% cada uno).